Esta semana nos ha dejado el apreciado constitucionalista chileno don Jorge Tapia Valdés, gran demócrata, e importante jurista y profesor universitario.
El profesor Tapia Valdés fue un destacado abogado, Licenciado en Ciencias Jurídicas y Sociales por la Universidad de Chile, el año 1960. Años más tarde obtuvo la Maestría en Derecho por la Universidad de Yale y el Doctorado en Derecho en la Universidad Erasmus de Rotterdam de Holanda.
Fue Subdirector del Departamento de Derecho Público de la Universidad de Chile, y Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Arturo Prat de Iquique. Además, ejerció notablemente la docencia en la Universidad de La República y la Universidad Andrés Bello en Chile, además de la Universidad de Zulia, Ohio University y Erasmus Universiteit Rotterdam, entre otras instituciones extranjeras.
En el ámbito público, destaca su labor como asesor del Senado durante 18 años, y como Secretario de la Comisión de Constitución y Justicia de dicha cámara entre 1969 y 1972. A continuación, fue Ministro de Educación y de Justicia bajo el gobierno del ex Presidente Salvador Allende en 1972 y 1973. Luego del Golpe Militar. conoció de cerca los avatares de la dictadura, estuvo detenido en la Isla Dawson y vivió el exilio por largos años en Europa. Con el regreso a la democracia, don Jorge Tapia asumió como embajador en los Países Bajos (1990-1994) e Israel (1994-1997) y, más tarde, como Intendente de la Región de Tarapacá en el año 2000.
Muchas fueron sus áreas de estudio dentro del Derecho Constitucional, donde el maestro Tapia Valdés plasmó su rigurosidad y sabiduría. Una de ellas tuvo que ver con la labor parlamentaria, siendo su libro “La técnica legislativa” (Editorial Jurídica, 1954) una de las obras pioneras en la materia en Chile. También en lo relativo a la interpretación constitucional donde defendió la tesis que ella debe someterse a reglas propias, diferentes a las del Código Civil, en su obra precisamente titulada “Hermenéutica Constitucional” (Editorial Jurídica, 1973).
Desde la Teoría Política, debe ser mencionado su libro “El Terrorismo de Estado: la doctrina de la Seguridad Nacional en el Cono Sur” (Editorial Nueva Imagen, México, 1980) en el cual narra con crítica aguda la política exterior norteamericana durante la Guerra Fría y cómo ella influye en la doctrina militar latinoamericana, con énfasis en Brasil y Chile. También reflexionó sobre los límites al poder constituyente en un importante artículo publicado en la Revista Estudios Constitucionales el año 2008, el cual lleva por título “Poder constituyente irregular: los límites metajurídicos del poder constituyente originario”.
Sin embargo, y sin el ánimo de desmerecer todos sus demás trabajos, probablemente el ámbito donde más destacó don Jorge Tapia tuvo que ver con la Regionalización (como técnica de distribución del poder en el territorio) y el Regionalismo (como tendencia política dirigida a dotar de mayor autonomía a las regiones y de poder de intervención en la toma de decisiones a nivel central). En ese contexto fue particularmente crítico de la Reforma Constitucional del año 2005, la cual a su juicio no hizo más que consolidar el centralismo.
“Usando una anticuada noción de Estado Unitario, Santiago convence tanto a las regiones como a las minorías y a los pueblos indígenas, que oponerse a sus directivas de modo más auténtico y radical que lo que sus reglas del juego permiten, equivale a un delito de lesa patria. De este modo, a la debilidad congénita y causada, histórica y actual de las sociedades civiles de las regiones para avanzar hacia la autonomía relativa y/o formas de autogobierno de base democrática, se añade el problema de compartir, sabiéndolo la ideología del enemigo”. Así describía, con dolor y pesimismo, a propósito de las mencionadas reformas, la hegemonía política y cultural de la metrópoli en un artículo publicado en el libro “La Constitución Reformada” coordinado por Humberto Nogueira (Editorial Librotecnia, 2005).
Pero, probablemente, son sus rasgos humanos los que más destacan en la persona de don Jorge Tapia. Así, su profunda vocación democrática, tanto como forma de gobierno como de vida, es sin duda, una de sus cualidades más notorias. Su disposición al diálogo abierto y franco, su capacidad de respetar las posturas y convicciones de quienes piensan distinto e incluso su tolerancia a la crítica a sus opiniones y trabajo son un fiel reflejo del ciudadano que fue don Jorge. Incluso al momento de analizar períodos tan duros de nuestra historia, de los que a él le correspondió ser actor y víctima, su altura de miras siempre fue un faro que guió su discurso.
La enorme calidad humana de don Jorge también se manifestó en su exitosa carrera como profesor universitario e investigador. Fue un profesor cercano, respetuoso y empático. Sin perder en ningún momento el rigor académico, su trato a los y las estudiantes fue el de un verdadero maestro, amable y cercano, siempre dispuesto a contribuir a sacar lo mejor de cada uno de aquellos y aquellas que tuvieron el honor de compartir su aula.
Luego de una larga de vida de aventuras, experiencias y logros, ya radicado en Madrid, don Jorge siempre se mostró abierto a ayudar a los investigadores e investigadoras que requirieron su ayuda y consejo. Quienes firmamos esta columna podemos confirmar lo anterior por experiencia personal.
En esta hora del adiós son muchas las cosas que podríamos escribir de Jorge Tapia Valdés, seguramente otros y otras también lo harán, porque sin duda fue un hombre que dejo sus huellas grabadas en muchas vidas. Quienes tuvimos el privilegio de conocerlo, compartir con él, ser acogidos en su casa y alimentarnos de su infinita sabiduría, pudimos constar una de sus caualidades más entrañables: una sencillez y bondad que solo se da en las grandes personas. Un abrazo hasta la eternidad amigo. (Santiago, 1 julio 2020)
I met Prof.Jorge Tapia as exile and Erasmus Uni Prof.in Rotterdam in 1984.
We were in his house and the very few hours we talked together somehow have changed my life.I’ m still very grateful to him for his deep understanding and soul’s generosity.Si tu vales,ego valeo