Por: Rayen Carmona y Carla Díaz
En días recientes, DiarioConstitucional.cl entrevistó a Carlos Appelgren Balbontín, Director General de Política Consular y de Inmigración, quien nos comenta cómo en Chile cada vez se implementan más programas en respuesta a la creciente migración que se ha estado experimentando en los últimos años, que facilitan la estancia de las personas extranjeras que llegan a nuestro país.
También se abordó la situación de los chilenos en el extranjero, en especial el ejercicio del derecho a sufragar.
¿Cuáles son los principales desafíos que tiene Chile respecto a la creciente inmigración?
Cabe señalar que la población debe aceptar el hecho de convivir con otras culturas, pero también existe un grupo muy grande de discriminación y un fuerte imponente de nacionalidad. De igual modo, Chile ha avanzado en políticas migratorias, como por ejemplo el acceso al sistema de salud y también las visas por razones laborales y unión civil, entre otras medidas.
Chile definió e implementó durante estos años el Programa de Fortalecimiento de la Política Consular y Migratoria, destinad a definir una Política de Estado para la Vinculación con los Nacionales Residentes en el Exterior. De esta manera, con el Programa buscamos robustecer la política consular y migratoria mediante la estandarización de protocolos, formalización de redes locales de apoyo, validación y entrega de servicios consulares de asistencia y retorno para chilenos en situación de vulnerabilidad.
De igual modo, Chile ha suscrito una serie de acuerdos y convenios bilaterales en materia de cooperación migratoria y consular con Colombia, Ecuador, Panamá y República Dominicana, los cuales se han institucionalizado en Comisiones Binacionales sobre Asuntos Migratorios y Consulares conformadas por los Ministerios de Relaciones Exteriores de cada uno de estos países. Por lo tanto, buscamos institucionalizar espacios de diálogo y cooperación con los países de origen de la migración que se encuentra en nuestro país. Cabe señalar que en la actualidad se está trabajando en la implementación de estos acuerdos con otros países de la región como Perú y Haití.
Y en el plazo del periodo 2017-2018, en conjunto con los países del proceso regional de consulta migratoria que se expresa en la Conferencia Suramericana sobre Migraciones (CSM), Chile participa activamente en la definición de Principios, Compromisos y Entendimiento para una Pacto Mundial para una Migración Ordenada, Segura y Regular. En ese sentido, buscamos establecer un marco global para una adecuada Gobernanza de las Migraciones Internacionales, cuestión que adquiere especial significación para Chile, considerado que es el país en la región que más migrantes ha recibido en los últimos años.
En ese sentido, ¿cuáles son las medidas concretas que el Estado ha ido adoptando para integrar a los inmigrantes a la sociedad chilena y mejorar el enfoque de las políticas públicas?
Chile ha liderado diversos procesos regionales en el sentido de establecer nuevos hitos para la Gobernanza Migratoria. Procesos que se ha efectuado con los países de origen de la migración y también en el espacio de concertación política regional de la CSM.
En esa línea, hemos impulsado el principio y lineamiento del Acceso a la Justicia para las personas migrantes, como base y expresión del enfoque de derechos humanos que debe ser determinante al momento de la elaboración de las políticas públicas en el ámbito migratorio. Para ello, se determinó el importante rol de los Gobiernos locales constituyendo el primer y principal espacio de interacción entre la las personas migrantes y la sociedad de acogida, configurando además un espacio fundamental para responder a los desafíos que estos procesos migratorios plantean.
También, haciéndonos cargo de los procesos emergentes que marcan las definiciones de las políticas públicas, Chile en forma paulatina ha ido incorporando la dimensión migratoria en las políticas sobre gestión de riesgos y desastres naturales, tales como la Unidad de Asistencia Humanitaria Internacional, que entrega asistencia a países que la soliciten en casos de emergencias o desastres naturales, y también la Unidad de Emergencias Consulares que coordina las redes consulares del país ante situaciones de desastres o emergencias, protegiendo a los connacionales. En esta labor se ha contado con el apoyo de diversos organismos internacionales, en donde destaca la Organización Internacional para las Migraciones.
Finalmente, debemos destacar un hecho de carácter histórico en las definiciones de políticas referidas a nuestros connacionales residentes en el exterior, como es el ejercicio de sufragio que se vio concretado por primera vez en la historia republicana de nuestro país, al posibilitarse que estos compatriotas puedan participar de los comicios presidenciales desde sus países de residencia.
En cuanto al aumento de inmigrantes en Chile, ¿qué medidasse han consultado para regularizar la residencia y el acceso a salud, educación y trabajo?
El Gobierno a través del Ministerio del Interior, en el marco del Instructivo Presidencial sobre Política Nacional Migratoria, y el espacio de trabajo del Consejo de Política Migratoria ha establecido y aplicado diversas decisiones destinadas especialmente a la promoción de la residencia regular, esta última definida como la base jurídica administrativa necesaria para el adecuado acceso a derechos a las personas migrantes.
Entre estas medidas se encuentra las visas por razones laborales y unión civil; medidas para la nacionalidad de niños migrantes nacidos en Chile; acceso al sistema de salud; coordinación en la gestión con los gobiernos locales; mecanismos de información a las personas migrantes; plan nacional sobre la Trata de Personas; acuerdos en el ámbito del trabajo y las organizaciones sindicales. Además de las iniciativas ya enunciadas, en el plano de la política de vinculación con los nacionales residentes en el exterior, se busca avanzar en la respuesta integral a los desafíos de la migración en Chile.
¿Se ha avanzado en promover una cultura para integrar a los inmigrantes?
La Presidenta Michelle Bachelet invita a construir una Cultura de Acogida para las Personas Migrantes y define a Chile como un País de Migración.
Una “cultura migrante” supone reconocer al migrante, como “persona sujeto de derecho” lo que conlleva a una valoración integral de su rol en la comunidad que lo acoge, en este caso en Chile como país de destino de la migración.
La cuestión y respuesta a esta pregunta es cómo construimos una “Cultura Migrante” en Chile que efectivamente posibilite un desarrollo integral tanto del país como de las mismas personas migrantes.
Los principales obstáculos a esta “Cultura Migrante” son la intolerancia, el racismo, el clasismo y la xenofobia. Al respecto, el rol de actores como el sector privado, los académicos, el Gobierno local y regional, la sociedad civil y particularmente los medios de comunicación, es fundamental para avanzar hacia una mejor integración de las personas migrantes en el país. El Gobierno de Chile, y en especial la Presidenta de la República, está comprometida con el logro de estos objetivos.
En cuanto a los chilenos que residen en el extranjero, ¿esta primera experiencia que significó ejercer el derecho a sufragar generó dificultades de implementación?
El proceso electoral que se realizó en el extranjero es un espejo del proceso que se efectúa en Chile. En tal sentido, se adoptaron los mismos estándares de transparencia, publicidad y seguridad que existen a nivel interno. Trabajamos en forma coordinada con el Servicio Electoral, tanto para garantizar una adecuada difusión, implementación de los actos preparatorios y, por cierto, el escrutinio local en el extranjero.