El Consejo para la Trasparencia (CPLT) planteó los riesgos de una supervisión sin política de datos personales claro, al referir al sistema de reconocimiento facial implementado en un mall de la zona oriente de Santiago. "La ciudadanía está desprotegida ante abusos que pudieran cometerse con sus datos personales", dijo su presidente, Marcelo Drago.
Ante ello, el llamado de la entidad es a “que la ciudadanía exija a las empresas que se resguarde su información. La gente debe tener claro que en este caso pagan justos por pecadores, porque la gran mayoría de los clientes del centro comercial compran sus productos de manera legal, y el mall tendrá igualmente acceso a sus antecedentes personales, que pasarán a ser parte de una gran base de datos”.
Drago destacó también que al momento de registrarse la imagen “la persona (titular) pierde el control de sus datos al ser manejados por un tercero, que debe decirnos qué va a hacer con ellos y cómo los va a resguardar. No basta que declare que no va a entregar esos datos a otras instituciones”.
Por esta razón recordó la urgencia al proyecto de ley que reforma la normativa de Protección de Datos Personales –que data de 1999-. “Este sistema vuelve a poner en el tapete la relevancia de un marco regulatorio acorde con las necesidades actuales”, espetó.
Agregó que “en el caso de expandirse este tipo de sistemas de carácter intrusivo se hace necesario contar a la brevedad con una ley que prevenga eventuales abusos y que permita tener una autoridad de control con las facultades fiscalizadoras y sancionatorias, que garantice el adecuado ejercicio del derecho a la protección de datos de las personas”.
El titular del Consejo afirmó que “sin una política de datos de cara a la ciudadanía que resguarde la integridad, confidencialidad y acceso a los datos de las personas, no hay un compromiso claro de parte del sector privado de un buen uso y tratamiento de estos antecedentes”. Por ello enfatizó en que deben implementarse a la brevedad estándares de tratamiento de datos personales internacionales, que ya son exigidos por la Unión Europea y también en que “la gente debe saber la importancia que tiene mantener el control sobre sus datos personales, incluyendo sus rasgos faciales”.
El presidente del CPLT explicó que la imagen es un dato personal que permite individualizar al usuario de un servicio – en este caso del cliente-, y que “pese a que entendemos que iniciativas como ésta tienen como fin dar seguridad a los clientes y en ese sentido está bien, tenemos que considerar que se trata de datos sensibles, cuyo tratamiento requiere autorización legal o consentimiento del titular”.
Agregó que medidas como éstas “pueden generar un uso descontrolado de estas tecnologías, puesto que con el fin de evitar acciones delictuales podríamos terminar justificando que graben a cualquier persona y con cualquier excusa, vulnerando su intimidad”.
Comentó que en el Consejo se ha discutido respecto de casos conocidos en redes sociales como “cámaras en tiendas comerciales instaladas en los probadores. Eso habla de una supervisión con poco o nada de control que merece ser revisada”.
Desde la municipalidad y el mall aclararon que los datos sólo serán operados por la policía uniformada y la PDI, ya que el centro comercial sólo será una especie de puente, debido a que pondrá a disposición los equipos pero que no se manejarán datos personales de quienes ingresen a los edificios.
Con el uso de estas cámaras se indicó que no tienen margen de error en la identificación, ya que realizan perfiles biométricos exactos, logrando ubicar incluso a personas que utilicen cualquier tipo de camuflaje para burlar los servicios de seguridad.
RELACIONADOS
*Acerca de la transferencia internacional de datos personales…
*Presidente del CPLT asegura estar "cada vez más cerca el fin del abuso" tras anuncio de urgencia al proyecto de protección de datos personales…